Mejor Sistema Educativo

Reporte de Competitividad Global del World Economic Forum (WFE) 2021

Habilidades para el Futuro

Índice Mundial de Educación para el Futuro (WEFFI) 2019

Habilidades de Comprensión Lectora

Prueba Internacional PISA Lenguaje 2023

Habilidades Académicas Globales

Prueba Internacional PISA 2023 Lenguaje, Matemáticas y Ciencias







Aprendizaje a través del juego:

Los estudios demuestran que los niños desarrollan una variedad de habilidades a través del juego, incluyendo habilidades cognitivas, sociales, emocionales, físicas y de pensamiento crítico. Durante el juego, practican habilidades cotidianas que necesitarán más adelante en la vida. El juego libre les da la oportunidad de seguir sus intereses, incorporar nuevas habilidades y expresarse.

El niño como participante activo

Fomentamos la curiosidad de los niños al animarlos a hacer preguntas y a detenerse a reflexionar sobre el mundo que les rodea. Les enseñamos a pensar por sí mismos, a amar el aprendizaje, a resolver problemas, a expresar cómo se sienten y a valorar su propia opinión. Los niños tienen reuniones donde pueden votar sobre decisiones que les afectan, como opciones de paseos, las reglas del aula y más.

Aprendizaje holístico

Vemos a los niños como individuos únicos con sus propias ideas, pensamientos y necesidades, por eso nos centramos en su bienestar físico y emocional, junto con sus necesidades educativas. Fomentamos la participación y la autonomía de los niños, enseñándoles a cuidar de sí mismos y de los demás y desarrollamos su capacidad social.
Se avanza a través de proyectos multidisciplinarios, en el que los niños construyen su propio conocimiento a través de la exploración lúdica con la guía y el apoyo de los maestros.

Personalización del plan de aprendizaje

Creemos en reconocer a cada niño como una persona completa y trabajamos para educar a niños seguros y capaces social, emocional y académicamente hablando. Este enfoque integral guían el aprendizaje de cada niño.

Excelencia profesional de los educadores

Los profesores son formados para que ser lúdicos, curiosos, críticos y respetuosos en su trabajo. Asumen la responsabilidad de su propio proceso de aprendizaje y de apoyar el desarrollo positivo de cada niño.

Aprendizaje situacional

Creemos que el aprendizaje de los niños no se limita a actividades en el aula. Cada situación y momento es una oportunidad para aprender algo nuevo. Los profesores deben reconocer estos momentos para aprender nuevas habilidades, como ponerse los zapatos o explorar al aire libre, e impulsar la oportunidad de aprendizaje pues los niños aprenden mejor cuando lo que aprenden pueden aplicarlos a sus propias vidas y experiencias personales.

Habilidades Transversales

Debido a que el mundo que nos rodea cambia constantemente, debemos aprender a adaptarnos rápidamente. Ser capaz de conectar diferentes campos de conocimiento y habilidades es la base para el crecimiento personal, el estudio, el trabajo y el compromiso cívico.
El método finlandés cubre una amplia variedad de áreas de aprendizaje para que los niños adquieran diferentes habilidades y capacidades que contribuirán a su competencia transversal.

El aprendizaje como experiencia social

El aprendizaje es una experiencia social. Las relaciones de los niños moldean la forma en que ven el mundo y afectan todas las áreas de su aprendizaje y desarrollo socioemocional.
A través de interacciones, los niños aprenden las habilidades socioemocionales necesarias para expresarse e interactuar eficazmente con los demás en todo tipo de situaciones.
Las experiencias emocionales positivas y las relaciones cercanas promueven el sentido de bienestar, seguridad y pertenencia del niño, lo que a su vez respalda su participación activa y sus procesos de aprendizaje.

Desarrollo de la resiliencia

Los momentos de fracaso suelen enseñarnos mucho más que los momentos de éxito. Cuando los niños no tienen éxito en una tarea o actividad de inmediato, aprenden a persistir y a encontrar diferentes formas de abordar un problema. Más importante aún, aprenden a manejar la decepción y la frustración que surgen del fracaso y a reaccionar ante esos sentimientos.
Alentamos a los niños a perseverar y volver a intentarlo porque esto genera resiliencia y determinación, las cuales son habilidades clave en los estudiantes de por vida.

Sostenibilidad

Todos los aspectos de la educación deben involucrar prácticas que sean duraderas y que cuiden a la comunidad. La sostenibilidad abarca muchas áreas de la vida, desde prácticas sociales como enseñar a los niños la empatía y el pensamiento ético, a consideraciones ecológicas como el desarrollo de la relación de los niños con la naturaleza y su voluntad de cuidar activamente el medio ambiente.
Los niños aprenden prácticas sustentables, como reciclar y cuidar las plantas. También aprenden a cuidar el entorno de aprendizaje limpiando lo que ensucian ellos mismos, respetando el espacio y compartiendo con los demás.

Confianza y colaboración entre escuela y hogar

Una cooperación y confianza estrecha y positiva entre los profesores y familias tiene un efecto significativo en el aprendizaje del niño y en su futura experiencia escolar.
Los padres tienen la primera y más poderosa influencia en el aprendizaje, el desarrollo, la salud y el bienestar de sus hijos, por lo que es importante trabajar de manera constante con los profesores.
Cuando los adultos de confianza trabajan juntos, los niños involucrados obtienen una sensación de continuidad y seguridad en sus vidas.











El pensamiento crítico es una habilidad importante para un aprendizaje eficaz. Para poder procesar información y expresarse, los niños necesitan saber pensar de forma clara y sistemática.

Aprender a cuidar de uno mismo y gestionar la vida diaria son partes esenciales de las actividades de educación infantil. Los niños deben aprender a cuidar de su propio bienestar y del de los demás mediante interacciones seguras.

La competencia y la interacción culturales son extremadamente importantes en un mundo cambiante, razón por la cual los niños deben aprender a respetar a otras personas e interactuar con los demás.

Participación e implicación. La motivación para aprender cosas nuevas se fortalece cuando los niños pueden opinar sobre lo que se hace y cómo se hace. Es importante darles oportunidad de participar y practicar sus propias habilidades para influir en situaciones que les conciernen.

Multialfabetización. Los niños que hablan más de un idioma aprenden más rápido y más fácilmente, tienen mejores habilidades para resolver problemas y son muy creativos. También tienden a mostrar más empatía hacia los demás y pueden conectarse mejor con otras personas y culturas diversas. Son más receptivos a experiencias nuevas y diferentes y de mente más abierta.